Imágenes del desembarco de los inmigrantes al llegar al puerto de Alicante y de una voluntaria de Cruz Roja atendiendo a uno de los rescatados antes de ser evacuado a un centro hospitalario RAFA ARJONES

La Guardia Civil localizó, tras el aviso de un pesquero, una pequeña barca a la deriva a 28 millas de Torrevieja y tres de los rescatados fueron evacuados por Cruz Roja al Hospital General

P. CERRADA-Diario Información
Una pequeña patera a la deriva con once inmigrantes argelinos a bordo fue rescatada ayer por el Servicio Marítimo de la Guardia Civil a 28 millas de Torrevieja y remolcada hasta el puerto de Alicante, donde Cruz Roja prestó asistencia a los rescatados y evacuó a tres de ellos al Hospital General porque llevaban cinco días sin ingerir alimentos y presentaban síntomas de deshidratación más graves que el resto de compañeros de travesía. Tras recibir la asistencia de Cruz Roja, el Cuerpo Nacional de Policía se hizo cargo de los detenidos para realizar los trámites de expulsión del país y ponerlos a disposición judicial para solicitar su ingreso en un centro de internamiento antes de ser repatriados. Dos de los rescatados aseguraron ser menores de edad -de 17 años-, por lo que se dio parte a la Fiscalía.
La patera, de cuatro metros de eslora, fue avistada sobre las once y media de la mañana por un pesquero y de inmediato se movilizaron efectivos de la Guardia Civil, Salvamento Marítimo y helicópteros del Consorcio de Bomberos y de la Guardia Civil.
Un helicóptero de la Benemérita que estaba por la zona de Torrevieja fue el primero en llegar y localizar la patera, aunque el Consorcio de Bomberos aseguró en un comunicado que su helicóptero fue quien descubrió la barca de los inmigrantes. En cualquier caso, poco después llegaron las embarcaciones de Salvamento Marítimo y de la Guardia Civil. Los guardias civiles embarcaron a los inmigrantes en la patrullera y se dirigieron al puerto de Alicante, donde atracaron pasadas las dos y media de la tarde.
Siete voluntarios de Cruz Roja asistieron a los inmigrantes, que "se encontraban cansados y con síntomas de deshidratación, ya que llevaba una semana en el mar y cinco días sin tomar alimentos". Los ocupantes de la patera, que llevaba una brújula para orientarse tiraron al mar el motor fueraborda después que se rompiera.
Tras la aparición de la patera, el conseller de Gobernación, Serafín Castellano, volvió a reclamar más "mecanismos de vigilancia y medios en las costas valencianas". Castellano lamentó además que haya sido un pesquero, "una vez más, el que haya dado el aviso de la llegada de la embarcación en alta mar", en referencia a los radares del SIVE instalados en la costa alicantina.
 

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