agricultoresLos españoles no han ocupado los puestos de trabajo que perdieron los inmigrantes en el año 2009 como consecuencia de la crisis económica. Y es que en casi todas las ocupaciones en las que se reducen los puestos de trabajo de españoles, también caen los de extranjeros. Además, gran parte de los inmigrantes siguen ejerciendo empleos de baja cualificación.

Los embates económicos han afectado más a los trabajadores extranjeros, cuya ocupación cayó un 7,4% (-339.300 empleos), que a los autóctonos, según se desprende del IV Estudio Inmigración y Mercado de Trabajo elaborado por Miguel Pajares, que ha difundido el Ministerio de Trabajo e Inmigración.

La tasa de paro refuerza esta idea: frente al 16,8% de los españoles sin trabajo, el 29,7% de los extranjeros había quedado desempleados.

Por otra parte, los empleos de baja cualificación siguen concentrando al 35,9% de los trabajadores inmigrantes, frente al 11% de los españoles. Y es que en 2009 la pérdida de afiliación se concentró en las categorías intermedias, frente a 2008, cuando el paro se cebó con los trabajadores menos preparados.

Los descensos en la afiliación a la Seguridad Social se concentraron en el régimen general y en el de autónomos, pero creció en el agrario y en el de empleados del hogar.

Lejos de la creencia que señala que los inmigrantes siguen trabajando en la economía informal, las estadísticas muestran que la pérdida de empleo entre los inmigrantes se ha producido tanto en la economía oficial como en la sumergida, donde ‘incluso puede ser mayor’ el número de personas que se han quedado sin ocupación.

Asimismo, se deduce una menor proporción de empleo sumergido, al comprobar que la distancia entre el número de afiliados a la Seguridad Social y la tasa de ocupados de la Encuesta de Población Activa se ha acortado durante 2009. Fuente:RedInmigrante.es

Nº 25: Inmigración y mercado de trabajo. Informe 2010

libro

Autor: Miguel Pajares

Inmigración y mercado de trabajo. Informe 2010 es un estudio sobre la situación de los principales colectivos inmigrantes en el mercado de trabajo en España en el año 2009, en un año marcado por la crisis económica.

La primera parte del libro incluye seis capítulos centrados en la exposición y análisis de las estadísticas sobre los flujos migratorios anuales, la ocupación, sectores y categorías laborales de ocupación y el desempleo entre la población inmigrada, así como la movilidad laboral, la recolocación de los parados y el retorno a sus países de origen.

La segunda parte, titulada Mirando al futuro, recoge en tres capítulos aspectos que han de adquirir protagonismo e importancia en las relaciones laborales del futuro, como son la lucha contra la discriminación en las empresas y la gestión de la diversidad cultural, así como una mirada a los flujos migratorios en la perspectiva de la recuperación económica y su incidencia sociodemográfica en España.

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