La meteorología impide la actuación de los miembros de las casas regionales en el "Día del Alicantino de Adopción"

C. PASCUAL La lluvia obligó ayer a suspender las actividades vespertinas del "Día del Alicantino de Adopción", que preveían la actuación de las casas regionales de Castilla La Mancha, Andalucía y la peña "Amigos de El Bonillo" de Albacete. El escenario acumulaba a primeras horas de la tarde parte del agua caída durante el mediodía, lo que suponía un "serio peligro" para los bailarines, según fuentes de la Diputación de Alicante, organizadora del acto.
Sin embargo, alrededor de un millar de personas, entre "alicantinos de adopción" y de nacimiento, disfrutaron por la mañana de la degustación de productos típicos y de una paella gigante.
En esta jornada de encuentro e intercambio, celebrada en las instalaciones de la Volvo Ocean Race en el Puerto de Alicante, se pudo bailar, cantar, comer y, sobre todo, disfrutar de las tradiciones.
Pese a que la inauguración oficial tuvo lugar pasadas las 13.30 horas, cuando el presidente de la Diputación, Joaquín Ripoll, cortaba una simbólica cinta, cientos de personas disfrutaban ya desde minutos antes de las danzas ofrecidas por la Casa de las Américas, a la vez que probaban una "deliciosa" sopa paraguaya, según explicaba Carmela Gómez, andaluza afincada en Alicante desde hace más de cuatro décadas.
En Galicia, el ritmo estaba a cargo de un grupo de gaiteros que amenizaban la degustación de "un buen queso de tetilla regado por el mejor ribeiro", en palabras de María Rivas, que llegó a Alicante hace apenas dos años por motivos de trabajo.
Ya en Castilla, desde Hellín llegó la tradicional tamborrada, que animaba a la hora de elegir qué embutido llevarse a la boca.
En Castilla y León triunfó el hornazo, mientras en Murcia llamaba la atención el limón exprimido que se ofrecía a los visitantes. Poco después, tuvo lugar la visita oficial de las autoridades, con Ripoll a la cabeza y en un segundo plano la subdelegada del Gobierno, Encarna Llinares, y el portavoz del grupo socialista en el Ayuntamiento, Roque Moreno. En este recorrido destacó el emotivo "Asturias, Patria Querida" que brindó la Casa de Asturias junto a "culines" de sidra o la divertida sevillana que llegó desde el sur, a ritmo de "Vivo en Alicante y aquí está mi Andalucía".